“… Hemos decidido continuar trabajando hasta cuando sea posible” habría dicho meses atrás, Rafael Henríquez, director de Oxfam Nicaragua, en una entrevista a la cadena de noticias alemana Deutsche Welle.

Pues ya no es posible. El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo notificó de la cancelación de los registros de la Organización No Gubernamental Oxfam, es decir  la cancelación de su personería jurídica. Además liquidarán sus bienes y escrutarán sus libros contables.

La decisión abarca cinco oenegés más, las que se suman a decenas de organizaciones inhabilitadas para trabajar en el país desde el 2018.

Aunque para la socióloga Elvira Cuadra, la expulsión directa o indirecta de programas de cooperación, inició en el 2007, cuando el gobierno sandinista retornó al poder.

Una cuestión de tiempo

Oxfam tiene presencia en Nicaragua desde los años 60 y sus proyectos emprenden ayuda humanitaria, derechos humanos, producción agroecológica y protección del medio ambiente, mismos que serán suspendidos afectando a sus beneficiados.

Con la resolución, se desestima una relación de décadas,  mientras se niega a comunidades empobrecidas la oportunidad para desarrollarse, agregó Cuadra.

Escucha las noticias de la mañana por Radio Darío

Rafael Henríquez, quien compareció en televisión internacional cuando recién entró en vigencia la Ley de Agentes Extranjeros, pronosticó que trabajar en Nicaragua bajo esa normativa sería imposible y tenía razón, solo  era cuestión de tiempo.

Otro  consultor que prefirió el anonimato por razones de seguridad, declaró a Radio Darío que las ONG son organizaciones civiles que durante muchos años han dado cobertura a personas, comunidades y necesidades que el estado no atiende por distintas razones.

La misma fuente, sostuvo que antes de que explotara la crisis de 2018, las ONG representaban entre el 25% y 45% de la cobertura en temas como salud, educación, agropecuaria, derechos humanos, desarrollo local y comunitario, agroecología y hasta pesca. Estos y otros sectores, asegura están quedando sin recibir atención técnica ni financiera.

Oxfam y la emergencia humanitaria Iota y Eta

Oxfam, junto con organizaciones locales aliadas, respondieron de forma contundente ante la emergencia humanitaria para las personas más afectadas por las inundaciones y los fuertes vientos producidos por los huracanes Eta y Iota  en Nicaragua.

Fue una de las primeras ong que llegó con alimentos y artículos de aseo a comunidades arrasadas: “esperamos poder llegar con alimentos y artículos de aseo a unas 15 mil personas como parte de nuestra respuesta” habrían informado desde esa organización.

También tenía en marcha acciones de respuesta humanitaria ante la inseguridad alimentaria producida por la sequía en el Corredor Seco Centroamericano e implementaba acciones de respuesta a la pandemia del COVID-19.

Enviá la palabra NOTICIA nuestro WhatsApp y recibí las noticias de Radio Darío

Al referirse a los efectos del cierre de Oxfam,  el entrevistado cree  que se atenta  contra toda forma de colaboración con la gente más vulnerable del país, pues disminuirá aún más la cooperación internacional.

El segundo impacto señala, será el crecimiento del desempleo, pues socios y colaboradores no encontrarán un puesto de trabajo en el corto plazo.

Apunta como tercer efecto negativo, la falta de asistencia y oportunidades en salud, educación, agropecuaria, desarrollo rural, desarrollo comunitario, desarrollo local, derechos humanos, participación ciudadana, etc.

Oxfam contaba en Nicaragua con organizaciones socias que ahora quedarán  expuestas al escrutinio gubernamental, por lo que no se descarta que se suspendan más personerías jurídicas.