Ayer lunes 26 de octubre se conmemoró el día nacional del médico nicaragüense, una fecha, que para gremios independientes no representó, de ninguna forma, una ocasión para celebrar a los profesionales de la salud.

Al contrario, para el doctor José Luis Borgen, vicepresidente de la Unidad Médica Nicaragüense (UMN), el escenario para el gremio de la salud ha sido marcado en los últimos tres años; primero, por los despidos masivos a partir de 2018 y por último los estragos ocasionados por la pandemia.

Según Borgen, quien fue despedido en abril de 2018 por brindar atención médica a manifestantes, en 2020 un total de 800 trabajadores de la salud resultaron contagiados con el virus y 109 fallecieron por la misma causa, cifra no reconocida por el Ministerio de la Salud.

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Por su parte José Borgen expresó que dentro de estos contagios se han registrado más de 800 trabajadores de la salud que han sido contagiados, y de esos han fallecido 109 siendo en su mayoría médicos, ya que 49 médicos han fallecido debido a que les prohibieron en las unidades de salud, medios de protección ante la pandemia que atravesamos actualmente siendo .

Así mismo hizo referencia que “muchos de ellos se han recuperado pero que también muchos de ellos han quedado con secuelas a causa de dicha enfermedad. Manifestando que los médicos que trataron de llevar por cuenta propia cuidado personal a los hospitales por el virus o que solicitaron protección, estos fueron despedidos, contabilizando hasta la fecha a 32 médicos despedidos y una buena parte de personal de enfermería y laboratorio técnico”.

El gremio médico no solo ha sido afectado por los contagios y muertes a causa del Covid-19, este 2020 al menos 32 médicos especialistas fueron apartados de algunos centros hospitalarios estatales.

La cifra de 2018 es mucho mayor, según el representante de la Unidad Médica Nicaragüense, en ese año, 212 médicos, la mayoría especialistas, fueron despedidos del Ministerio de Salud.

Borgen dijo que “desde el pasado mes de abril del 2018, se han despedido 450 trabajadores de la salud, siendo 212 médicos en total de diferentes especialidades y médicos generales”.

En gran parte aquellos médicos que han sido despedidos han sido porque han considerado que han sido opositores al gobierno de Daniel Ortega, llevando desde abril más de 100 denuncias por renuncias por acoso a trabajadores expresó José Luis Borgen.