Este viernes 17 de julio se cumple un año de la ataque policia a una familia en el barrio Guadalupe en León. El saldo fue una persona muerta y dos heridas.

La familia Murillo López dormía la madrugada del 17 de julio hace un año cuando un colectivo de la policía nacional irrumpió con violencia en el domicilio. En la oscuridad ejecutaron al menos ocho disparos de arma de fuego.

Las detonaciones y el grito de familiares alarmó a los vecinos.

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Karen López con su hija en brazo corrió desde el cuarto para encender los bombillos que iluminan el corredor de la casa, se encontró la escena; tres familiares en el suelo heridos de bala.

Bryan su hermano, quien dormía en la sala recibió los primeros disparos y murió sin poder recibir asistencia hospitalaria. Kenner y Javier dejaron sobrevivieron al ataque.

La policía de León luego de cometer el crimen acusó a Bryan Murillo López (22), Javier Cortez Castillo y Kenner Murillo López de ser delincuentes, quienes presuntamente se abalanzaron con machete sobre un oficial.

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Kenner Murillo López (izquierda) y Bryan Murillo López (derecha) heridos con arma de fuego por la policía de León el 17 de julio de 2019. Foto | Redes sociales

Un vecino de la familia dijo a Radio Darío ese 17 de julio, que los policías habrían salido de la casa pidiendo refuerzo a un capitán porque habían cometido un error; “Capitán necesitamos refuerzo, la encabé”, habría dicho un oficial vía telefónica, tras cometer el crimen.

Marina López, madre de los hermanos Bryan y Kenner, rechazó la versión policial y expresó que la policía se lavó las manos.

Radio Darío ha intentado conversar con los sobrevivientes del ataque, sin embargo aseguran no quieren referirse al tema.

Crimen de la policía en León. Un año del ataque armado a una familia en Guadalupe

En el comunicado hace un año la policía aseguró remitiría a Kenner Murillo López y Javier Cortéz Castillo ante las autoridades para su enjuiciamiento, el caso no volvió a ser tratado.

Las policía de León no pudo demostrar los señalamientos. Bryan se dedicaba al oficio de albañilería, Kenner era colaborador del área administrativa en un súper mercado y Javier se desempeñaba en una empresa de telecomunicaciones.

El crimen de la policía contra la familia Murillo López en el barrio Guadalupe en León, es solo uno más donde la impunidad es respalda por el sistema de justicia nicaragüense.

Por Francisco Torrez Tapia