Un informe publicado este lunes por Diálogo Interamericano señala que la presión internacional debe ser clave para “garantizar una transición democrática” en Nicaragua.

El último informe difundido por Diálogo Interamericano reclama una postura mucho más efectiva por parte de los países de la comunidad internacional para frenar la crisis política, social y humanitaria que hay en el país. Y, al mismo tiempo, presionar al Gobierno de Nicaragua liderado por el presidente Daniel Ortega y su mujer, la vicepresidenta Rosario Murillo.

“La obsesión por el poder del gobierno de (Daniel) Ortega y (Rosario) Murillo se ha ido hacia los extremos y han convertido el país en un estado que básicamente ya no respeta el orden ni el derecho internacional”, explicaba Manuel Orozco, director del Programa de Migraciones, Remesas y Desarrollo de esa organización, durante una intervención vía Zoom para abordar los puntos más importantes de esta investigación.

En ese sentido, subraya que el pueblo nicaragüense prácticamente no tiene margen de movimiento dentro del país en tanto que los que se opongan públicamente a las políticas del gobierno de Managua pueden enfrentarse a una orden de arresto.

En su opinión, la “desinformación sistemática” y la “censura” también han sido otros factores que han dejado un panorama “devastador”, según comentaba Orozco. “El año pasado se registraron más de 200.000 nicaragüenses saliendo del país, este año el número va más o menos en la misma dirección”, alertaba.