Radio Darío conversó con Eduardo Enríquez, jefe de redacción del diario La Prensa para analizar la crisis sociopolítica de Nicaragua desde el criterio de la prensa independiente.

Sobre las elecciones presidenciales en noviembre del próximo año, Eduardo Enríquez piensa hay que prepararse e ir unidos, pero es honesto en confesar lo que puede ocurrir tras los resultados.

La única vez que Daniel Ortega permitió que las y los nicaragüenses eligieran a su presidente fue en las urnas de 1990, el resultado es historia, fue derrotado en la contienda por Doña Violeta Barrios de Chamorro.

El periodista no avizora un evento similar. “desgraciadamente no puedo ser positivo y decirte que veo al gobierno dispuesto a entregar el poder, y ese es mi temor que vayan a tomar acciones para que aun perdiendo mantengan el poder”, señaló en la entrevista ofrecida en el programa Aquí Estamos.

El jefe de redacción de La Prensa cree que el modelo que sigue Nicaragua de Cuba y Venezuela no es cuestión de jugar con votos, es cuestión de mantener la represión para mantenerse en el poder.

El periodista y escritor considera que la oposición tiene el reto de trabajar unida. Pero se refiere a la oposición desde las personas que participaron en abril de 2018 en las protestas anti gobierno.

¿Cómo ve a la Coalición Nacional?

Los cuatro partidos políticos de la Coalición Nacional superan por número de votos a las demás organizaciones, una ventaja en la toma de decisiones. Para Eduardo Enríquez los partidos políticos tradicionales deben estar fuera porque asegura “no aportan nada, más bien están haciendo obstáculo en la construcción de la unidad”.

Pese a los esfuerzos y gestiones, la Coalición Nacional es vista como una organización controlada por partidos políticos tradicionales y empresarios que antes habían mantenido vínculos con el Frente Sandinista de Liberación Nacional.

La Coalición Nacional que aglutina organizaciones políticas y cívicas para hacer un solo frente de oposición al régimen de Daniel Ortega aun no logra el reconocimiento de la mayor parte de la ciudadanía, que reclama la presencia de otros sectores que estuvieron al frente de la lucha cívica en abril de 2018, entre ellos, jóvenes y estudiantes.

La feroz represión que desató el régimen de Daniel Ortega a las manifestaciones ciudadanas hace dos años es lo que hasta ahora lo mantienen en el poder. Para Eduardo Enríquez, autor del libro “Muerte de una República”, la represión en todas sus manifestaciones va a continuar.

Por Francisco Torrez Tapia