Hace cuatro años surgió una iniciativa ciudadana con el propósito de realizar diversas acciones de saneamiento  del Río Chiquito en la ciudad de León.

La propuesta fue presentada al alcalde Roger Gurdián, quien se mostró anuente con respecto a  la propuesta de la sociedad civil.

Las primeras acciones fueron un  diagnóstico de la situación real del riachuelo y jornadas de limpiezas apoyadas por estudiantes universitarios.

Pero el proyecto quedó en el limbo debido a la situación sociopolítica del país ya que el gobierno local no volvió a convocar a la comisión, según Jacinto Salinas quien coordinaba esta iniciativa.

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Salinas indicó que la evaluación arrojó que la contaminación del Río se debe a la falta de mantenimiento en las tuberías de más de cincuenta manjoles que se encuentran sobre la ribera de la fuente hídrica.

Otro factor de contaminación son las sustancias químicas y desechos que caen al río por parte de las tenerías que se encuentran ubicadas a la orilla del cauce, según el ambientalista.

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Los desechos de las tenerías caen en las aguas del Río Chiquito, según Jacinto Salinas. Foto | Radio Darío

A ello agrega el lanzamiento de basura al río de parte de pobladores mientras el gobierno municipal no aplica la ordenanza local referida al medio ambiente.

Según Jacinto Salinas este problema ambiental debe considerarse una crisis de salud pública por las afectaciones a la ciudadanía, y el deterioro de la flora y la fauna, ya que las aguas podridas desembocan en la Isla Juan Venado.

Con información de Leo Cárcamo Herrera