La organización Panamericana de la Salud (OPS) en un reciente informe dio a conocer que desde el año 2018 a la fecha se presentaron en las Américas 72 mil casos de cáncer cérvico uterino ocasionando la muerte de 34 mil mujeres entre las edades de 18 a 65 años.

Esa entidad informó que entre los años 2018 y 2021, se han registrado 462 mil casos de cáncer de mama y que de estas fallecieron 100 mil féminas.

A estas cifras se suma otra enfermedad silenciosa, el virus del Papiloma Humano, que se convierte en la principal causa que conlleva a los diagnósticos de cáncer cérvico uterino.

La doctora María de los Ángeles Flores, gineco-obstetra del Centro de Mujeres Ixchen en la ciudad de León advirtió sobre la importancia de realizar pruebas como el Papanicolaou o la mamografía para detectar lesiones cancerígenas.

María de los Ángeles Flores, gineco-obstetra

Según datos profesionales proporcionados por la ginecóloga, de cada diez mujeres que la visitan en ese centro de atención, tres de ellas presentan casos de Papiloma Humano.

Para la gineco-obstetra cuando se presentan estos casos se debe atender la responsabilidad junto a la pareja, porque los hombres portadores de este virus no presentan sintomatología.

María de los Ángeles Flores, gineco-obstetra

Para la psicóloga Meryce Mejía, representante del enlace de la Red de Mujeres contra la Violencia los casos de cáncer de mamas y cáncer cérvico uterino representan una carga emocional muy fuerte para las afectadas.

Según Mejía, las mujeres que sobreviven a estas enfermedades soportan una alta carga de estrés que posiblemente trae consigo otras enfermedades.

Meryce Mejía, psicóloga | Red de Mujeres contra la Violencia

Con información del periodista Leo Cárcamo