El Obispo nicaragüense, Monseñor Silvio José Báez, invitó a los feligreses a no perder las esperanzas y a confiar siempre en Dios, aún por muy difícil que sean los tiempos en donde el hombre es sometido por el mismo hombre a actos de injusticia y maldad.

“Es hora de renovar nuestra fe en el poder transformador de la oración, es por eso que debemos preguntarnos si estamos rezando por la guerra de Ucrania, estamos sufriendo en oración a nuestros presos políticos que están siendo torturados cruelmente y sometidos a juicios ilegales.

Están presentes en nuestra oración, el dolor y la angustia, las lágrimas de las víctimas y la incertidumbre de los exiliados. Todo esto forma parte de nuestra oración”, dijo Monseñor Báez.

Monseñor Báez mencionó que la irracionalidad, la injusticia y la violencia de regímenes de muerte se imponen en el mundo, “vemos a las victimas sufrir, parece que todos los esfuerzos por lograr cambios pacíficos se vuelven inútiles, son momentos terribles de oscuridad, es entonces que debemos subir al monte con Jesús”, agregó.

El clérigo también recordó que solo manteniendo la fe en Dios, se podrá vencer a las fuerzas de la oscuridad que aquejan al mundo.

El religioso hizo un llamado a la ciudadanía a orar y a renovar la fe en Dios, para que el amor reine en cada persona.“La fe no es un sentimiento barato que nos encierra egoístamente en nosotros mismos, ni la oración es tampoco un refugio egoísta para disfrutar”, dijo.

“Hace falta tomar distancia y elevarnos por encima de los pantanos del fracaso, de la mediocridad y la desesperanza y que es necesario elevarnos sobre la llanura de los intereses personales o ideológicos que nos hacen rígidos, indiferentes o pesimistas”, dijo Báez, en el segundo domingo de cuaresma.