Desde joven, María Teresa Fernández, se identificó con el trabajo de la tierra y la defensa de los derechos de las mujeres. En su familia aprendió a temprana edad las tareas del campo y las compartió con sus hermanos, “Mi padre y mi madre nos enseñaron las responsabilidades parejo, a mis hermanos y a mí, todos aportábamos” recuerda.

Recuerda la humildad y pobreza en la que creció, en una infancia que la acercó al campo, a la tierra, visitando las fincas de sus tías y tíos paternos, viendo la importancia que significaba la tierra para ellos.

Trabajar por los derechos de las mujeres, a vivir sin violencia y el derecho a la tierra han sido los grandes objetivos que se ha dispuesto desde la conformación de la Coordinadora de Mujeres Rurales, logrando que cientos de mujeres se organicen en cooperativas, para producir alimentos de forma orgánica.

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En esta entrevista a Radio Darío, María Teresa Fernández, nos comparte su experiencia de trabajo con las mujeres del campo, sus logros en la defensa de sus derechos y el de otras mujeres y su deseo de que cada mujer rural tenga derecho a la tierra.

¿Qué significado tiene la tierra para María Teresa y la defensa de los derechos?

Mi mamá nos metió a las cosas de la iglesia desde muy pequeña. Eso también en parte tiene que ver con ese amor que yo fui desarrollando por la tierra, y ahí viene mi compromiso que sigo teniendo y por el que sigo trabajando por las mujeres.

¿Fue la revolución Sandinista promotora de los derechos de las mujeres?

Yo trabajé desde el 84 al 91 en los cuadros del frente sandinista, pero no se vio cómo se mira ahora los derechos, a partir de los 90 ya se viene trabajando por los derechos humanos de las mujeres con los derechos humanos de la Juventud, de la niñez y tiene que ver también con los avances de los derechos humanos en el mundo, que cogen más fuerza en los 90.

¿Qué te ha motivado hasta ahora, para continuar con este trabajo de acompañamiento a las mujeres rurales?

Lo que me ayuda es esa resistencia de las mujeres, aunque este en el suelo la cosecha, aunque hayan perdido con los huracanes del año pasado, vuelven a trabajar, vuelven a cultivar y vuelven a levantarse, es decir ese ejemplo que te digo de resistencia, hace que el compromiso se mantenga y estemos ahí junto a ellas.

¿Cómo interpreta María Teresa la acción del gobierno de cancelar personerías jurídicas a ONG, organizaciones donantes como OXFAM?

Las mujeres y sus familias son las más afectadas. Porque si una mujer mejora, si una mujer avanza y una mujer va mejorando su calidad de vida mejora la calidad de vida de toda la familia. Entonces si te fijas los aportes de los organismos, en el caso de nuestra experiencia y de muchas que conocemos han sido para fortalecer las capacidades productivas de las mujeres, capacidades personales, técnicas para mejorar sus ingresos, para mejorar su producción, para tener acceso al agua, a la tierra y bueno ahora pues con todo lo que ha pasado se van a ver más limitaciones, más dificultades.

¿Siente María Teresa que ha logrado ver cumplido sus objetivos en el apoyo a las mujeres rurales?

Lo primero para mí es los niveles de empoderamiento de las mujeres, decir una mujer que el 2005 ni te miraba a los ojos, que se frotaba las manos, esa mujer es otra mujer hoy, es una mujer con un alto nivel de capacidad de reflexión, de aportes, de conciencia política, como decimos en el feminismo todo lo personal es político, entonces eso es evidente, vemos los niveles de empoderamiento de las mujeres adultas y mujeres jóvenes.

Una segunda parte es que ese poder que tienen ahora, ha hecho que sus organizaciones cooperativas se sostengan, estén unidas, estén trabajando y están fortaleciendo su unidad organizativa en la cooperativa y todo el trabajo que lo hacen a partir de ser una cooperativista.

La lucha por la tierra para las mujeres ha sido uno de los principales trabajos de las cooperativas ¿cómo va este proceso?

Siempre, para empezar, decimos que jamás se implementó la ley 717, que hubiera permitido que al menos una mujer tuviera media manzana de tierra. Nosotras vamos a continuar trabajando y decimos que en algún momento le pondrán fondos a esa ley y las mujeres se podrán beneficiar.

¿Qué podrías decirles a las mujeres en estos momentos difíciles en Nicaragua?

Estamos en una situación muy compleja, muy difícil, lo primero es un llamado a las mujeres organizadas, pero también a las mujeres en el campo y a todas las familias que tengan la oportunidad de escuchar este mensaje, que se cuiden, que tomen todas las medidas de seguridad para mantener la salud para no contagiarse o para no contagiar a sus familias.