Houston Castillo Vado / Voz de América

Anticipando una supuesta victoria en las urnas previo a las elecciones previstas para el 7 de noviembre en Nicaragua, el gobierno de Daniel Ortega anunció el martes un nuevo diálogo nacional después de los comicios, en un mensaje divulgado por el diputado sandinista Wálmaro Gutiérrez en una sesión parlamentaria.

El diálogo tendría lugar con “todos los sectores” del país, incluido “el gran capital”, con el cual Ortega rompió lazos después de las protestas de 2018 que dejaron más de 300 muertos según organismos de derechos humanos.

“Después de que el pueblo reafirme este próximo 7 de noviembre que el Frente Sandinista va a continuar gobernando en este país… se abre un gran diálogo nacional, donde van a caber todos”, dijo Gutiérrez.

Las declaraciones del legislador coinciden con otras de Ortega a principios del año, cuando adelantó esta posibilidad en medio de la crisis que vive el país centroamericano desde hace más de tres años.

En el panorama previsto, la treintena de opositores detenidos en los últimos meses por el gobierno podrían ser utilizados como “un canje” del mandatario para que se avale o se reconozca a su gobierno, advierten algunos analistas políticos, como el politólogo Manuel Orozco.

“Después de los juicios, Ortega buscará cómo negociar la libertad de estos prisioneros de conciencia”, dijo Orozco al medio 100%Noticias.

Además, indicó que “este proceso es parte de una retórica para salir del proceso electoral y una vez que salga de eso, Ortega va a entrar una nueva etapa, va a intentar negociar la libertad de estas personas. Ahora, la negociación va a depender de cuán desesperados estén”.

Sin embargo en una entrevista con la Voz de América en abril, el presidente del sector privado de Nicaragua, Michael Heally, expresó que dialogar con Ortega después de las elecciones dependería de dos cosas: la credibilidad y la legitimidad que tenga este gobierno y el entorno político y económico.

“Las decisiones que está tomando este gobierno van encaminado a la ilegitimidad y al no reconocimiento del gobierno a futuro. Si no libera a presos, si no cumple acuerdos, pone en una situación compleja y difícil al país y vas a tener un desgaste económico como el que estás viendo ahora”, dijo Heally.